El odio de la ONU al cristianismo y su amor a la Ideología de género
La ONU ataca directamente al cristianismo en favor de la ideología de género. Hizo público en Ginebra hace unas semanas un informe del relator especial sobre la libertad de religión o de creencias, en el que afirman que “la violencia de género y la discriminación hacia las mujeres, niñas y personas LGTBI se perpetúan en las comunidades religiosas de todas las regiones del mundo”
Los objetivos de la ONU alejados de los valores del cristianismo
Se afirma que numerosos países atentan contra los derechos de estos colectivos, discriminándolos, cuando no legalizan el aborto libre y gratuito, señalando, por ejemplo, a países hispanoamericanos.
¿Desde cuando matar a un ser inocente debe ser un derecho?
Desde la ONU pretenden acabar con el cristianismo porque les molestamos para sus objetivos de crear una nueva sociedad, el nuevo orden mundial, con unos nuevos valores donde el respeto a la vida de los no nacidos no tiene cabida, imponiendo una visión del ser humano que rompe con nuestra propia naturaleza del ser varón y mujer.
La ONU nos quieren implantar una vida sexual liberticida, y por supuesto, totalmente alejada del amor fecundo, fiel y para siempre que da lugar a la familia base del cristianismo.
S. Juán Pablo II la llamaba la célula social más pequeña. Es capaz de vivir por sí sola, pero es una institución fundamental para la vida de toda la sociedad, por lo que debería estar protegida como bien supremo por los gobiernos.
Pero lejos de esto, lo que quiere la ONU es borrar el cristianismo blindando con leyes a las personas LGTBI.
El aborto y estilos de vida LGTBI como fin a lograr desde la ONU
No es un tema nuevo, pero sí cada vez más visible. Desde la IV Conferencia de la Mujer en Beijin en 1995, ahora su 25 aniversario, legalizar la práctica del aborto libre y gratuito y la extensión de los nuevos estilos de vida LGTB en la población, es su prioridad.
Hablan constantemente de la defensa de los Derechos Humanos, pero la realidad es que hablan de unos nuevos derechos, que se han inventado. Pisoteando los derechos del niño como puedes comprobar aquí.
No tienen reparos en mentir afirmando en este documento en el artículo 51 que las normas cristianas, “oprimen a las mujeres, niñas y personas LGBT+, con las interpretaciones particulares de la doctrina religiosa”. Parece ser que la única interpretación posible es la que a ellos les interesa inventarse.
La verdadera defensa del cristianismo
Los cristianos defendemos y ensalzamos la dignidad de todas y cada una de las personas independientemente de sus orientaciones sexuales. A lo largo de la historia podemos hallar que el cristianismo ha sacado a muchas personas de vidas míseras y esclavas, dignificándolas como Hijos de Dios que es la base de la Declaración de los Derechos humanos. Una base cristiana y que ahora quieren hacer desaparecer para implantar una única ética universal. Cristo se acercó a los rechazados y marginados, ensalzó a la mujer y protegió a los más débiles. Afirmar que se oprime a las mujeres y personas LBTBI “por las interpretaciones patriarcales de la doctrina religiosa”, es una auténtica falacia y tergiversación de la realidad.
El Santo Padre S. Juán Pablo II advertía del peligro de las ideologías totalitarias que se quieren imponer con el pretexto de ser una justicia social.
Varias asociaciones, entre ellas, Enraizados, lanzaron campañas pidiendo al presidente de la ONU que reconsiderara esas acusaciones.
Pero de nada servirá si los cristianos miramos a otro lado y no somos capaces de alzar la voz ante tantos atentados hacia nuestra fe, la vida, la verdad y la libertad, como vemos a nuestro alrededor.
Esta es la verdadera cara de la ONU: odio hacia el cristianismo, objetivo: aniquilarlo y amor por encima de todo a la ideología de género que le reporta mucho dinero.
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Un saludo, la paz y hasta muy pronto:
ALICIA BEATRIZ MONTES FERRER
